La educación sexual infantil es tan o más importante que la educación sexual en la adolescencia, aunque no le prestemos la misma atención por pensar erróneamente que la infancia es una etapa de inocencia asexuada. La sexualidad infantil está presente desde el propio nacimiento, sólo que no es tal cual la imagina la mente adulta. Aprender sobre ello ayudará a desmantelar los mitos y a favorecer tanto en el hogar como en la escuela, una educación sexual infantil sana, coherente y de acuerdo con las diferentes etapas del desarrollo, que prevendrá de muchas posibles dificultades en edades posteriores.